Suscríbete al newsletter

    Suscríbete al newsletter

      newsletter_23

      Número 24 / Shevat 5781 – Enero de 2021

      Edición dedicada Leiluy Nishmat Aharon Souss ben Paulina.

      Ventas por Internet

      No sé qué hacer con el dinero

      Vendió un producto por Internet, cancelaron la operación, y el producto no le llegó. Lo resarcieron, y luego recuperó el producto. ¿De quién es el dinero extra?

      Pregunta

      ¡Hola! No sé qué hacer con el dinero que me enviaron de más, y quisiera saber si me pueden ayudar. Vendo libros usados a través de un sitio de Internet que vende de todo. La gente me da sus libros en desuso, yo los publico, y si se venden, descuento del valor publicado la comisión que se cobra el sitio de Internet, y le doy la mitad de la ganancia al dueño del libro, y la otra mitad es para mí. Hace dos meses se vendió un libro que estaba publicado a –digamos- 600. Cuando se efectivizó la entrega, la empresa me descontó su comisión, digamos 50, y quedaron 550 limpios para repartir, mitad para mi amigo, y mitad para mí. Unos días después, la clienta se puso en contacto conmigo, pidiéndome cancelar la operación, y explicándome que se había equivocado de libro, y que en verdad, no quería ese. Según las reglas del sitio de Internet, el cliente siempre tiene la razón, y procedimos a la cancelación: la señora envió por correo el libro, y le devolvieron el dinero; y a mí me descontaron los 550 que me habían pagado. Pero el libro nunca me llegó. Al notar la demora, reclamé a la empresa que debían reintegrarme mis 550, ya que el libro se había perdido, y eso era responsabilidad de ellos. Tras muchas idas y venidas, la empresa reconoció que habían cometido un error en el correo, y para repararlo, en lugar de 550, ¡me enviaron 600! Pero la historia no termina allí. A los pocos días, la amable señora que había hecho la devolución me llamó diciéndome que el libro había regresado a su domicilio, y que me lo quería devolver, ya que ¡no quería tener en su posesión algo que no era de ella! Ahora bien, de todo esto resulta que tengo en mi posesión el libro, y también tengo los 600 que me enviaron. Y mis preguntas son:

      1. Ahora que el libro “no se vendió”, pues se canceló la venta, y además lo recuperamos, ¿debo darle parte del dinero a mi amigo? Razono que quizás no, pues luego, en algún momento se va a vender de verdad.
      2. Y si es que sí debo darle una parte, qué importe debo darle, ¿la mitad de 550, o la mitad de 600? ¿U otro valor?

      ¡Muchas gracias!

      Respuesta

      ¡Hola! La respuesta es que en tanto que el arreglo que usted hace con quienes le dan sus libros para que usted los venda es que reparten el dinero de las ganancias en partes iguales, estos 600 se consideran una ganancia “de la sociedad”, y debe darle a su amigo la mitad, o sea, 300, más allá de la posesión o no del libro.

      A fin de clarificar la respuesta, lo que usted llama “arreglo”, para la Halajá es una sociedad de hecho, o sea: ustedes son socios, y la regla de la sociedad que hicieron es que las ganancias de la sociedad se dividen en partes iguales, y acá la sociedad ganó 600, independientemente de la venta o no venta del libro. Por eso debe repartirse. Y cuando se venda el libro que recuperaron, ¡tendrán una nueva ganancia para repartir!

      Querido lector: nuestros sabios nos enseñan que nunca debemos aprender
      una Halajá a partir de otra que aparenta ser igual o similar. Por favor,
      no saques conclusiones de los casos aquí presentados; dirígete a tu Rabino
      para clarificar qué debes hacer tú en tu caso.

      Para compartir tus comentarios, historias, ideas, o sugerencias,
      o para recibir información sobre nuestros programas,
      por favor escríbenos a: info@osherbeyosher.org

      Otras ediciones

      Start typing and press Enter to search